Un avance de más del 70 por ciento llevan los trabajos de perforación de los 42 pozos de absorción en la cabecera y las juntas municipales de Bécal, Nunkiní y Dzitbalché, cuyo objetivo es prevenir de inundaciones las calles y hogares en la temporada de lluvias que se aproxima.
El director de obras públicas de la comuna, Pastor Rodríguez Cuevas señaló por instrucciones del alcalde, Víctor Hugo Baltazar Rodríguez, que además de la construcción de nuevos pozos se están dando mantenimiento a 55 ya existentes con una inversión superior a los cinco millones de pesos.
De las 42 pozos, 14 se construyen en Dzitbalché, 13 en Calkiní, nueve en Bécal y seis en Nunkiní. Mientras que el desazolve será para 55 drenajes con un costo de un millón 208 mil pesos en las cuatro zonas.
Vecinos de la junta de Bécal y Dzitbalché, expresan que estas obras los beneficiará, pues después de muchos años de padecer dificultades para atravesar calles encharcadas, finalmente se da atención a esta problemática.
Rubén Jiménez Montero agradeció a las autoridades municipales por la atinada decisión de construir más pozos de absorción lo que permitirá despejar las vías de circulación, principalmente en esta temporada de lluvias beneficiando tanto a peatones como a los automovilistas.
Con el mismo agradecimiento se pronunció el señor Marcelo Caamal, de la ciudad de Dzitbalché, al mencionar que una vez terminada esta obra los niños y la ciudadanía en general podrá transitar sin mayor dificultad, y dejarán de sufrir los constantes encharcamientos en esa zona.
Sostuvo que estas obras deben estar apoyadas por la ciudadanía, evitando tirar basura en la calle para mantenerlos limpios y no obstruya la circulación del agua.
Rodríguez Cuevas afirmó que los trabajos de perforación llevan hasta más de un 70 por ciento de avance en estas comunidades faltando por colocar las tapas y rejillas, para luego ponerla al servicio de la ciudadanía y estar listos en esta temporada de lluvias.
De antemano, pidió a colaborar en mantener limpio los alrededores donde se construyen los pozos de absorción con el fin de evitar que se obstruyan a causa de la basura.
